Ayer escuché a Ricardo Darín reproducir algo que había escuchado.
Remarcaba la paradójica visión de que por primera vez la economía
mundial está en jaque porque compramos sólo lo que necesitamos.
Podríamos decir que una situación de crisis nos remite a lo esencial.
Cuando todo lo superfluo, anecdótico, lo añadido deja de pertenecer a la
esfera de lo humano, sobrevive la esencia, que es lo que nos construye
como seres. "La esencia es aquello invariable y permanente que
constituye la naturaleza de las cosas" (parte de la definición
oficializada). La tarea que tenemos es identificar lo que nos constituye
como base. Allí surge un conflicto perceptivo que suele ser más bien un
conflicto de intereses. ¿Cuál es la esencia que nos constituye como
tales?
Para algunos parece ser que lo esencial se caratula como lo
imprescindible. Así es como podríamos resumir la "buena" existencia con
el hecho primario de la simple supervivencia biológica. Tales asuntos se
circunscribirían a hechos cuasi motrices como comer, cagar, asearse,
trabajar para conseguir estos últimos, educarse para conseguir realizar
estos últimos, y todo lo que sea necesario para estos últimos. Punto. La
realización pasa a ser un mero hecho de supervivencia y ya no de
existencia. Porque para mi la existencia es el resumen de todo lo que
nos constituye como seres, y el ser es todo aquello que nos construye
como individuo y como colectivo.
Entonces pareciera ser que las
asignaturas artísticas en las escuelas son menos importante que poseer
un móvil. Me confunde, pero parece ser una premisa muy considerada. La
cultura, una vez más, se pone a un lado para algunos que predican el
utilitarismo, el materialismo, el consumismo, como la esencia de la
vida. Aquello que nos permitirá vivir. Un discurso que encaja perfecto
en muchos sectores, sobre todo aquellos que abanderan la
"econoproductividad". A su vez estos sectores se encuentran como el
resto de los sectores, confinados en cuatro paredes, aludiendo a
artilugios que permitan llevar el encierro con mayor soltura y
despreocupación como pueden ser la lectura, el cine, la música, el arte,
las manualidades, y todo esto junto en los casos de tener niño/as a su
cargo. Todo aquello que es tan menospreciado, desechado del conjunto de
necesidades esenciales. Aquellas asignaturas de la educación
bastardeadas hasta arrastrar a sus márgenes. La cultura como lo
sobrante, lo que viene de cola.
Me pregunto cuantos de estos seres
pensantes estarán estos días rastrillando la "net" para poder armar un
castillo de ilusiones, dar con unas notas musicales o empapar de morados
y verdes las cerdas. Ahora parece ser algo esencial para que las
paredes no se nos caigan encima.
En realidad creo que no es que
este colectivo no le interese la cultura y el arte, o lo vean como algo
secundario, sino que lo ven como algo privilegiado, algo que es sólo
para quien se encuentra realizado en todos los campos de los derechos,
los esenciales y los que no lo son tanto. Lo que quieren es marcar la
diferencia, demostrarnos de qué están hechos.
Pero volviendo al la
esencia del ser, me pregunto qué es lo que nos hace tan especiales de
otros seres vivos. Pues eso, la cultura, el imaginario. Lo simbólico.
Todo es símbolo. Sin símbolo no somos más que una tuerca. Y eso es lo
que quieren aquellos que necesitan tuercas para poder mantener armada la
estructura que los mantiene en la cima, desde donde se pueden escuchar
la totalidad de los discos grabados, ver la inmensidad pictórica de la
vida, alumbrar sus codicias con poesía autoreferencial.
No somos
nadie sin cultura porque la cultura es lo que somos. Las personas mas
desdichadas del mundo, quienes transcurren sus días tropezándose con la
muerte y la miseria, tienen la involuntaria capacidad de un día poder
toparse casi por accidente con un vals que interrumpa su pesar
existencial y provoque en su alma, por inercia, un desliz, un
zigzagueante corpóreo y mental exquisito que le permita por un instante
barrer con toda la mierda que lo inunda y volver a su esencia. Eso
también es salud.
Hasta la cultura siempre
Obra del artista Pere Jaume